Como médico dedicado a sus pacientes en esta zona del Sahara, atendió a los soldados saharauis y familias, con la misma atención que a los soldados europeos y era una gran ayuda en todos los aspectos sanitarios de la dura vida en los puestos del Sahara para los oficiales de la A.T.N. que con él compartían destino, entre los que le conocieron dejó un imborrable recuerdo.
Su última iniciativa, ya retirado, de general de sanidad fue la de intentar escribir un relato que reuniera todas las experiencias en el territorio de los distintos oficiales médicos que estuvieron destinado en la agrupación.
La dispersión de los mismos y la ausencia por fallecimiento de alguno de ellos no permitieron que esta iniciativa cuajara, y lástima, que hubiese sido un punto verdaderamente diferente sobre la vida del conjunto de la agrupación.
Desde aquí acompañamos en el recuerdo y dolor a los familiares